Conquista
Quiero acercarme a tus lados truncos y aprovecharme de esos espacios sombríos, sugerirte despacio que abras tus caminos paganos. No sospechas que la invasión ha comenzado que he decidido declararte mío en un abrazo y profanando tus fronteras conquistar los límites donde aún no te he besado. Será tarde cuando me sientas a esa hora te habré devorado, unas partes con labios dulces de primavera y otras con lengua incendiaria de verano. Te emboscaré con mi garganta de vino blanco, saborearé tu savia clara y rogarás que te diga cuanto te amo.